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marentagantsi vr. {imarentaka} avr. cantar canciones sagradas (para invocar a los espíritus auxiliares). ◊ Tradicionalmente, esto era oficio solamente de los chamanes salvo que una mujer, generalmente su esposa, cantara junto con él, siguiéndole, para ayudarle en la ceremonia que siempre se hacía de noche tomando ayahuasca. Se pensaba que el propósito de invocar a los espíritus auxiliares (inetsaane) con los que, según se afirmaba, los chamanes hacían contacto, era para que vinieran a cuidarle, a sanar a un enfermo, a defenderle contra los espíritus malos, etc. Yogarora seripigari igamarampite, imarentakara ikantakotakerira inetsaane kameti iripokakeniri inkavintsaantakera. Omarentanaka irorori itsinanetsite ogiatakotanakeri. Cuando un chamán toma ayahuasca, canta invocando a sus espíritus auxiliares para que vengan a hacer algún favor. Su mujer canta repitiendo lo que él canta (lit. siguiendo su ejemplo). bvr. silbar (ciertas serpientes). ◊ Según se afirma, hay ciertas serpientes, como el jergón, la shushupe y el loro-machaco, que “silban” por la tarde cuando se pone el sol. Notomi, gara pikenasevageti kara onaronkashiku, ikemakeritari pirenti chapi imarentakara maranke yagukari. Hijo, no andes por allí por la hierba alta, porque ayer tu hermano escuchó a una serpiente silbando y quizá te pueda morder. V. seripigari, inetsáane, kamárampi.

imarentaka V. marentagantsi.

opegompitunkanira

pegompitagantsi vi. {ipegompitake} tocar pegompirintsi. ◊ Tradicionalmente los hombres no tocaban por la tarde cuando comenzaba a anochecer, sino solamente tempranito por la mañanita. De lo contrario, se pensaba que una serpiente o más, iba a molestarse y morder a la persona que tocaba, porque por la tarde las serpientes tocaban o cantaban (imarentakara) y no les gustaba la competencia. También se decía que si una persona nunca había sido mordida por una serpiente, no se debía escuchar ni imitar a las serpientes cuando tocaban, porque de lo contrario iba a ser mordida. Además las mujeres tenían miedo de tocar, porque si no tocaban bien, una serpiente las podría morder. Garira ogoti opegompitira, iragavitakero maranke, irorotari opinkantaigarorira tsinane ompegompiigera. Si (una mujer) no sabe tocar bien el pegompirintsi, una serpiente la puede morder, y por eso las mujeres tienen miedo de tocar.

vavireagantsi vavirenkagantsi vt. {yovavireakero, yovavirenkakero} deshacer o sacar una puente, una escalera o un palo que sirve de puente o escalera Pairani yogari seripigari aiño ivaviro ikenantakarira yatagutanakera iatakera enoku imarentakara. Antari okutagitetanaira yovavireairo onkantakera inoshikairo yoginoriairora saviku ganiri yatagutiro ananeki. Antiguamente los curanderos tenían sus escaleras por medio de las que subían bien arriba cuando cantaban. Entonces cuando amanecía, las sacaban y las ponían abajo para que los niños no subieran. Ogari pavirontsi niakutirira atake omakatanake, nerotyo yovavirenkakero notineri irovetsikaerora impavitantaemparora okyarira inchapoa. El puente en la quebrada ya se estaba tornando quebradizo, así que mi yerno lo deshizo y va a hacer otro puente con un palo nuevo. Noatake noneerira ige, noneapaakero igenampiro yovavirenkakero nokanti: “¿Tyarika iatake ige?” Fui a visitar a mi hermano, y al llegar vi que había sacado su escalera y dije: “¿A dónde habrá ido mi hermano?” o-1Apén. 1; pavireagantsi; -re2/-renk 4.8.3.11.

okanontagantsi vt. {iokanontakeri, yokanontakeri} librar de algo fastidioso, de enfermedades o de demonios; curar de los efectos de un encuentro con un demonio. Noshinto, piate okanontavakeri piariri tsigito, onti yoveraanakeri ikaemavavagetake, tsikyari nage sekatsi ompote aigaeniri shintsi. Hija, anda espanta a los mosquitos que están fastidiando a tu hermanito y (haciéndole) llorar a gritos para que yo pueda coger yuca rapidito e irnos pronto. ◊ Tradicionalmente las acciones que se utilizaban para procurar librar a los enfermos de sus enfermedades y de los seres que, se pensaba, las estaban causando eran realizadas por un curandero o chamán. Entre estas acciones estaban tomar ayahuasca, dar palmadas al llegar donde el enfermo y abanicarle con un abanico especial hecho de hojas. Yogari seripigari yamake ishigementontsishite yovoroshitapaakeri mantsigari iokanontakerira imantsigane intiri kantakeririra. El curandero trae su abanico especial de hojas y abanica al enfermo para librarle de su enfermedad, y también de lo que está causándola. Agavakeri iriniro, ¡ojojoo!, ianativagetanakera pairataketyo panikyatyo inkamanakera ontivani itonki. Impogini yogari iriri inti seripigari imarentaka iokanontairi. (Cuentan que) su madre lo recibió y, ¡qué barbaridad!, tenía una fiebre alta y estaba a punto de morir y solamente estaba hueso y pellejo. Entonces como su padre era curandero comenzó a cantar y a curarle (de los efectos de su encuentro con el demonio). V. okagantsi1; -anont 4.8.1.3.